Tierra

Lo más apropiado sería hablar del Sistema Tierra-Luna, puesto que la masa de la Luna es comparable a la de la Tierra y este caso es único en el Sistema Solar (las masas de los satélites son muy inferiores a las de los planetas alrededor de los cuales orbitan). La densidad media de la Tierra es el 1.67 superior a la densidad de la Luna y su masa es 81.3 veces superior. Por este motivo la Tierra es capaz de retener una atmósfera mientras que la Luna no. Otra gran diferencia entre la Tierra y la Luna es su interior: el interior de la Luna es frío mientras que el interior de la Tierra es caliente. La existencia de una fuente interna de calor provoca la aparición de corrientes de enfriamiento entre el núcleo caliente y la corteza fría; estas corrientes son responsables del vulcanismo y los seísmos, la deriva de los continentes y el intenso campo magnético de la Tierra.